La capital británica sigue apoyando al talento joven con iniciativas diversas y un calendario repleto de jóvenes talentos
La industria textil británica se enfrenta a un futuro cercano incierto, pero eso no ha frenado a su buque insignia, el British Fashion Council, que regula el funcionamiento de la moda de autor del país y cuya misión es, entre otras, convertirlo en talento exportable.
lgunos de los diseñadores han seguido apostando por el formato digital al que se han visto forzados a recurrir estas dos últimas temporadas. En el calendario inglés, el vídeo supone “mayor difusión a muchos niveles dentro de la industria, hace que la moda como entretenimiento sea más accesible y no esté solamente al alcance de unos pocos”.
